El Hospital Universitario Puerta del Mar está aplicando ya la terapia de oxigenación de membrana extracorpórea o ECMO en pacientes neonatos y pediátricos. Se trata de una terapia que consiste en un circuito que toma la sangre del paciente a través de un pequeño tubo llevándola hacia una bomba –el corazón- que la impulsa a través de una máquina que le añade oxígeno –pulmón- para devolverla al paciente a través de otro pequeño tubo. En definitiva, es un dispositivo que sustituye temporalmente las funciones cardiacas y pulmonares.
El centro gaditano viene desarrollando la terapia de en adultos desde hace seis años; concretamente, para pacientes de cirugía cardíaca y respiratoria. Por ello, como destaca la pediatra neonatal, Pamela Zafra, esta incorporación para bebés supone “disponer de una técnica que está sólo al alcance de las mejores UCI neonatales de España, continuando en un constante proceso de formación del personal facultativo y de enfermería con el fin de ofrecer la mejor asistencia a nuestros pacientes más frágiles: los recién nacidos con patología crítica”.
La terapia ECMO supone un apoyo vital para el corazón y los pulmones, permitiendo la recuperación de dichos órganos mientras el resto de tratamiento ejerce su acción y se espera a la recuperación de la enfermedad de base. El beneficio fundamental es que gracias a la ECMO se consigue que sobrevivan pacientes que sin dicha técnica fallecerían, por lo que se hacía necesario poder contar con esta terapia en el centro, como pone de relieve el enfermero perfusionista y también presidente de la Asociación Española de Perfusionistas, Carlos García Camacho.
Los profesionales gaditanos han tenido que formarse durante un año para aplicar la terapia ECMO con garantía y seguridad a los pacientes pediátricos y neonatos, continuando desde entonces en un constante proceso de formación, tanto personal facultativo como de enfermería con el fin de ofrecer la mejor asistencia a los pacientes más frágiles: los recién nacidos con patología crítica.
Una vez realizada dicha formación, se introduce la técnica en la UCI Neonatal del Hospital Puerta del Mar y se ha comenzado a aplicar la técnica. El primer caso fue en octubre del pasado año cuando un bebé nacido en otro hospital requirió en el Puerta del Mar de esta técnica para su traslado al Hospital Universitario Virgen del Rocío. Si no se le hubiera aplicado la terapia ECMO, el bebé hubiera fallecido. Y es que se trata de un sistema muy complejo porque exige que el bebé se mantenga con circulación extracorpórea, requiriendo trabajo en equipo por parte de profesionales de diferentes especialidades, especialmente de Cirugía Cardiovascular y Pediatría. La terapia ECMO permitió que el bebé fuera trasladado a Sevilla. Estuvo 28 días con la máquina y a los dos meses, el joven paciente pudo regresar al Hospital Puerta del Mar.
Tanto el jefe de Servicio de Cirugía Cardiovascular, Tomás Daroca, como el Jefe de Servicio de Pediatría, Simón Lubián, han resaltado la importancia que supone poder disponer de esta técnica en el centro, para casos como el señalado, donde el tiempo es fundamental. En la misma línea se ha pronunciado el responsable de la UCI Pediátrica, Arturo Hernández González, quien ha puesto en valor esta “técnica puente”, que aglutina el trabajo y conocimiento de un equipo multidisciplinar, el cual trabaja coordinadamente en el establecimiento de protocolos y procedimientos que guíen las actuaciones con los pacientes en ECMO.
Hoy día, en el Hospital, la terapia ECMO se incorpora en aquellos neonatos o niños que presentan problemas del corazón o los pulmones, que son reversibles y no permanentes, pero que no han mejorado con el tratamiento máximo ofrecidos en las UCI.